noviembre 16, 2007

HISTORIA UNIVERSAL: La Descolonizaciòn

¨ EL COLONIALISMO ¨
Sistema político económico caracterizado por la ocupación y administración de territorios por un gobierno ajeno a éstos, mediante la conquista, asentamiento y/o imposición de la autoridad extranjera. Existe colonialismo cuando un pueblo o un gobierno extiende su soberanía y establece un control político sobre otro territorio.
El proceso colonizador de la Europa moderna comenzó en el siglo XV y puede dividirse en dos fases:
1415 hasta 1800: Etapa caracterizada por la hegemonía de Europa occidental, con España y Portugal, que se expandieron por las Indias orientales y América.
1800 hasta la II Guerra Mundial: De los países europeos, es Gran Bretaña quien toma la iniciativa, seguida por Francia, en la expansión de Europa hacia Asia, África y el Pacífico.

¨La primera etapa colonizadora (siglos XV al XIX)¨
Se caracteriza por la carecía de un patrón lógico desde un punto de vista geográfico, ya que apuntaba más bien a una motivación económica, originada por la necesidad de encontrar una nueva ruta hacia oriente en busca de especias y recursos.
Existen así tres tipos de dominio territorial, considerando el tipo de control que se ejerce sobre éste:
Concesiones: Otorgándole ventajas comerciales a la potencia, como la entrega de puertos, consiguen mantener su independencia.
Protectorados: la potencia controla la política externa y determinados recursos económicos, pero se mantiene la autonomía local.
Colonias: corresponde a un sistema de dominación absoluta de un territorio. Según sus características podían ser estratégicas, de asentamiento o de extracción de recursos.
Los más antiguos imperios coloniales europeos comenzaron a decaer hacia el siglo XVIII. La mayoría de las colonias españolas, portuguesas y francesas en América consiguieron la independencia durante las Guerras Napoleónicas o en el periodo inmediatamente posterior (siglo XIX).
Los ingleses perdieron parte de sus posesiones en Estados Unidos, tras la Independencia en 1776; sin embargo, Gran Bretaña continuó siendo una importante potencia colonial. Además de controlar la India, conservaba por razones estratégicas algunas de las colonias que había ocupado durante las guerras europeas, tales como Canadá, el cabo de Buena Esperanza y Ceilán.

¨La Segunda Fase Del Colonialismo¨
La segunda etapa colonial puede dividirse en dos periodos:
Desde 1815 hasta 1880 aproximadamente
1880 hasta 1914: Las potencias coloniales actuaron con mayor decisión en este período, donde se llevó a cabo la colonización de África (salvo en el caso de Etiopía, que opuso resistencia a los intentos de conquista de Italia) y de diversas regiones de Asia y del Pacífico. Hacia 1914 se puede considerar que la red colonial mundial se había cerrado en torno al planeta, ya que la mayoría de los países africanos eran colonias europeas. El Imperio Británico continuaba siendo hegemónico, caracterizándose por su extensión y con más diversidad geográfica. Destacando luego Francia, Bélgica, Alemania, Portugal, Estados Unidos y Japón como potencias coloniales

¨LA DESCOLONIZACIÓN¨
Una vez finalizada la segunda guerra mundial (1941 a 1945) las colonias comenzaron a despertar de su letargo. Comenzó a desarrollarse un creciente sentimiento de conciencia nacional, lo que se sumaba al declive de la influencia política y militar del viejo continente como elemento hegemónico (debido a que el mundo posee dos polos: la URSS socialista v/s EEUU capitalista; ambas anticolonialistas), ya no existe justificación moral para los imperios (es deber de los más fuertes encargarse de los destinos de los más débiles, lo que no se traduce en educación y protección, sino en dominación y retraso económico de los colonizados), todas estas situaciones que contribuyeron al inicio del proceso de descolonización, que se extendió hasta la década de los ´70.
Muchas antiguas colonias han definido el colonialismo como un sistema de explotación que las potencias más fuertes imponían a las más débiles y que ocasionaba una situación de atraso económico, así como conflictos raciales y culturales, en las zonas colonizadas.
El colonialismo suele entenderse con una connotación negativa, pues muchas veces tras la buena intención de sacar a los pueblos del atraso, no primas más que intereses económicos por apropiarse de sus recursos y materias primas, junto con controlar sus territorios y someter laboralmente a su población. Sumado a esto se da el hecho que, en caso de conflicto por parte de la potencia colonizadora, es deber de la colonia prestar ayuda, cual relación de vasallaje medieval entre el señor feudal y el siervo.

¨La lucha contra la Teoría de la Dependencia¨
A finales de la década de 1950, la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) realizó diversas investigaciones para explicar el subdesarrollo económico y social que experimentaban numerosos zonas que sufren los países ‘periféricos’ (naciones históricamente explotadas en busca de materias primas y recursos por las grandes metrópolis) como zonas dependientes de los países ‘centrales’ (quines son los más industrializados.
Se basa en la lógica económica de encontrar zonas que provean de materias primas baratas que una potencia dominante adquiría, para luego manufacturarlas y exportarlas a las mismas zonas a altos precios. Como las zonas colonizadas carecen de recursos y tecnologías idóneas para poder trabajar sus propias materias primas y transformarlas en productos manufacturados, a fin de satisfacer sus propias necesidades, debían recurrir a préstamos internacionales, que se traducían en una deuda externa que afectaba a toda la población, generando así un círculo vicioso de dependencia y subdesarrollo económico.
Para romper el círculo es necesario crear conciencia a nivel local y generar iniciativas que logren cambiar las costumbres económicas, a fin de lograr el salto entre ser productores de materias primas y llegar a ser exportadores de productos manufacturados. El proceso obviamente es lento, pero es la base para salir del subdesarrollo y la dependencia.

¨Crecimiento v/s Desarrollo Económico¨
El Crecimiento económico puede entenderse como un aumento cuantitativo, es decir, las actividades productivas aumentan pues se poseen más recursos para invertir. Por tanto, a mayor dinero, mayor capacidad de inversión y por ende, aumento de la producción.
El Desarrollo tiene por regla máxima la existencia de un fenómeno previo que es el crecimiento, ya que una vez que aumenta la capacidad de inversión y la economía crece, se provoca el desarrollo que es un cambio cualitativo, vale decir, en la calidad de vida de las personas. Por tanto, a mayor crecimiento, más empleo, más empleo implica más recursos para adquirir mejor educación, salud, alimentación y vivienda.
El término subdesarrollado puede aplicarse por tanto a aquel país cuya calidad de vida de su población es deficiente o que carece de cambios en ella; un país en vías de desarrollo sería aquel que posee los recursos para invertir, por tanto está creciendo, pero donde los cambios en cuanto materias de calidad de vida aún no se han completado totalmente.
Por regla general, se considera al continente europeo como el máximo ejemplo de desarrollo, y al continente africano icono del subdesarrollo, y a América Latina el ejemplo de una zona que va camino al desarrollo. Sin embargo, en un mundo globalizado como el actual, estos términos ya no son absolutos, pues con la creación del G8 (el grupo de los siete países más poderosos del mundo y Rusia) los polos de desarrollo ya no están tan marcados, pues lo integran los siguientes países: Alemania, Italia, Japón, EEUU, Canadá, Francia, Reino Unido y Rusia.

¨El Colonialismo en África¨
El continente se encontraba dividido entre ingleses y franceses, caracterizándose las siguientes zonas:

¨Francia
Zona Ecuatorial: Son las posesiones que durante las dos últimas décadas del siglo XIX y la primera mitad del XX, conformaron lo que actualmente es la República Centroafricana, Chad, Congo y Gabón. La capital administrativa y del Estado era Brazzaville.
Zona Occidental: Posesión que a finales del siglo XIX y principios del XX, abarcó las actuales repúblicas de Benín, Guinea-Conakry, Costa de Marfil, Malí, Mauritania, Níger, Senegal y Burkina Faso. Su capital administrativa fue Dakar.

¨Gran Bretaña
Zona Occidental: territorio que durante el siglo XIX y la primera mitad del XX, actualmente independiente, que incluía Nigeria, Gambia, Sierra Leona, Ghana (antes perteneciente a Costa de Oro) y parte de Camerún.
Zona Oriental: territorio que desde 1900 hasta la década de 1960 incluía los actuales estados de Tanzania (antes Tanganica y la isla de Zanzíbar), Uganda y Kenia, independientes desde 1961, 1962 y 1963, respectivamente.

¨Se inicia la descolonización¨

¨La Zona de Francia: En el norte de África, la oposición al gobierno francés se desarrolló a partir de 1947 con actos terroristas esporádicos y motines. La revolución argelina comenzó en 1954 y continuó hasta la independencia del país en 1962, seis años después de que Marruecos y Túnez lograran su independencia. En la zona del Sahara se intentó contener los movimientos nacionalistas, al conceder a los habitantes de los territorios la ciudadanía total y permitir a diputados y senadores de cada territorio asistir a las sesiones de la Asamblea Nacional francesa. No obstante, el sufragio limitado y la representación comunal asignada a cada territorio se demostró inaceptable.
¨ La Zona Británica: Empezaron a aparecer partidos políticos que englobaron a tantos grupos étnicos, económicos y sociales como fue posible. En Sudán, los desacuerdos entre Egipto y Gran Bretaña sobre la dirección de la autonomía sudanesa obligó a que los británicos aceleraran el proceso de independencia de estos territorios, y Sudán se independizó en 1954. Durante la década de 1950, el ejemplo de las nuevas naciones independientes de otros continentes aceleraron los procesos. La independencia de Ghana en 1957 y de Guinea en 1958 desató una reacción en cadena de demandas nacionalistas.
Sólo en 1960 ya existían diecisiete naciones africanas. A finales de la década de los setenta casi toda África era independiente.
Las posesiones portuguesas —Angola, Cabo verde, Guinea-Bissau, y Mozambique— se independizaron entre 1974 y 1975, después de años de lucha violenta. Francia renunció a las islas Comores en 1975, y Djibouti consiguió la independencia en 1977.
En 1976 España dejó el Sahara español, que entonces fue dividido entre Mauritania y Marruecos. Aquí, sin embargo, estalló una cruda guerra por la independencia. Mauritania renunció a su parte en 1979, pero Marruecos, que tomó posesión de todo el territorio, continuó la lucha con el Frente Polisario, de carácter independentista. Zimbabwe consiguió la independencia legal en 1980. El último resto de la larga dependencia del continente, Namibia, consiguió la independencia en 1990.
El camino a ser nación: Los jóvenes estados africanos se enfrentan a varios problemas fundamentales. Uno de los más importantes es la creación de un Estado nacional. Gran parte de los países africanos retuvieron las fronteras que habían trazado arbitrariamente los diplomáticos y administradores europeos del siglo XIX. Cuando los estados africanos consiguieron la independencia, los movimientos nacionalistas dominantes y sus líderes se instalaron en un poder casi permanente. Llamaron a la unidad nacional y recomendaron encarecidamente que los sistemas parlamentarios de varios partidos fueran descartados en favor de un Estado con partido único. Cuando estos gobiernos no pudieron o no quisieron cumplir las expectativas populares, el recurso era a menudo la intervención militar. Al dejar la administración rutinaria en manos de la burocracia civil, los nuevos líderes militares se presentaron como eficientes y honestos guardianes públicos, pero pronto desarrollaron el mismo interés por el poder que caracterizó a sus predecesores civiles. En muchos estados, el comienzo de la década de 1990 despertó un renovado interés en la democracia parlamentaria de varios partidos.
El desarrollo económico Pese a que en el continente existen recursos naturales, se carece de un sistema económico solvente en cuanto fondos financieros. Las empresas privadas extranjeras a menudo han considerado la inversión en áreas subdesarrolladas demasiado arriesgada, y este punto de vista se justifica en muchos casos. Las mayores fuentes de financiación alternativas son las instituciones de préstamos nacionales y las multinacionales.
Las esperanzas de un mejor nivel de vida para las naciones africanas se han incrementado, y los precios de los bienes de consumo y otros bienes manufacturados se han mantenido, pero el precio de la mayoría de las materias primas africanas ha bajado. La recesión mundial de principios de la década de 1980 multiplicó las dificultades iniciadas con el aumento del precio del petróleo en la década de los setenta. Serios problemas con las divisas y una deuda exterior creciente agravaron el descontento público. El hambre y las sequías se extendieron por las regiones centrales y norteñas del continente en la década de los ochenta, y millones de refugiados abandonaron sus hogares en busca de comida, incrementando los problemas de los países a los que huían. Los recursos médicos, todavía inadecuados e insuficientes, se vieron desbordados por las epidemias, el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), el cólera y otras enfermedades.
A finales de la década de 1980 y primera mitad de la siguiente década, los conflictos locales en Chad, Somalia, la zona del Sahara, Sudáfrica y otras zonas del continente desestabilizaron gobiernos, interrumpieron el progreso económico y costaron la vida a miles de africanos. Después del final de la guerra civil en Somalia en 1991, un gobierno separado se estableció en Eritrea, que declaró su independencia en 1993. En abril de 1994 estalló la lucha entre los dos principales grupos étnicos de Ruanda, los hutu y los tutsi, después de que los presidentes de Ruanda y Burundi murieran en un sospechoso accidente aéreo. Los problemas en esta zona central de África han continuado a lo largo de 1996 y 1997, así como en Argelia, al norte, cuya paz y desarrollo están siendo amenazados por los atentados violentos cometidos por grupos integristas islámicos.
La importancia mundial: La mayoría de los estados africanos se consideran parte del Tercer Mundo y son miembros de la Organización de Países No-Alineados, a la que consideran un instrumento válido para hacerse oír en el concierto internacional de naciones. Sin embargo, a causa de su falta de poder militar o financiero, las opiniones de los países africanos rara vez son tomadas en cuenta. El fin de la política de segregación racial (apartheid) en Sudáfrica, a principios de la década de los noventa, llevó a la celebración de las primeras elecciones multirraciales en abril de 1994. El racismo parece tema superado en el continente, pero para que el mundo deje de mirar la procedencia por color de piel, hay un camino largo que recién comienza a recorrerse.

¨Las Colonias asiáticas¨
En un principio, las potencias occidentales llegaron a Asia para comerciar. Pero pronto exigieron concesiones a los gobiernos asiáticos en forma de territorios para crear bases militares que protegieran sus operaciones comerciales. Aunque los occidentales construyeron ferrocarriles, canales, carreteras y escuelas, las ventajas derivadas del comercio con Asia sólo beneficiaron a Occidente.
El colonialismo y el imperialismo de los siglos XVII al XX, trajeron nuevos problemas a los asiáticos, que hasta entonces habían absorbido oleadas sucesivas de invasores extranjeros. Los nuevos invasores llegaron por mar, en un principio para comerciar, pero según crecía su superioridad técnica y militar intentaron ejercer la hegemonía política y económica en el continente.
Para establecer su supremacía, los colonizadores europeos adoptaron un acercamiento gradual. A las peticiones de comercio seguían demandas de fortificaciones y tierra para proteger dicho comercio, así como de concesiones para explotar los recursos locales. Los imperialistas construyeron ferrocarriles, carreteras, canales y algunas escuelas. También invirtieron en plantaciones, pozos petrolíferos y otras empresas conectadas con el mundo económico, pero la mayoría de los beneficios se iban al extranjero. Mientras tanto, el crecimiento de la población ocasionó la fragmentación de las granjas, la urbanización y graves problemas sociales.
Excepto en Japón y en Siam, las instituciones tradicionales asiáticas fueron demasiado lentas en asimilar o adoptar técnicas o ideologías occidentales para prevenir una explotación humillante, los tratados desiguales o la cesión del gobierno a manos extranjeras. Ya durante la II Guerra Mundial, el nacionalismo y el socialismo se habían propagado entre la elite nativa educada a la manera occidental, y los movimientos autonómicos e independentistas surgieron en toda Asia. Los gobiernos coloniales, sin embargo, respondían lentamente a las expectativas que dichos movimientos generaban.
Siam mantuvo su independencia gracias a dos reyes progresistas, Mongkut y Chulalongkorn. La monarquía constitucional fue instaurada en 1932, pero los golpes de Estado que siguieron pusieron al frente del gobierno a dictadores militares, a la vez que la nueva denominación dada por éstos al país, Tailandia, simbolizaba el creciente nacionalismo.
Japón previno la invasión extranjera por medio de una rápida modernización. El gobierno construyó fábricas que, más tarde, vendió a compañías privadas. Japón inició una poderosa expansión militar: la conquista de Dongbei Pingyuan (Manchuria), las invasiones de China y el Sureste asiático, y, en 1940, la alianza con Adolf Hitler y Benito Mussolini, que aceptaron los planes japoneses de un nuevo orden en Asia oriental y suroriental.

¨La situación de la India, el subcontinente hindú¨
La participación nativa en el gobierno colonial de la India se amplió gradualmente, pero el ritmo nunca satisfizo las aspiraciones indias. Las escuelas, que enseñaban ideas liberales, producían más graduados de los que podía acoger el mercado de trabajo. El creciente descontento encontró nuevas voces: en 1885 en el Congreso Nacional Indio, dominado por los hindúes, y en 1906 en la Liga Musulmana. El fracaso de Gran Bretaña en garantizar a la India la esperada posición de dominio tras la I Guerra Mundial estimuló el movimiento de independencia dirigido por Mohandas Gandhi; en 1940 la Liga Musulmana, dirigida por Muhammad Alí Jinnah, exigió la creación de un Estado musulmán independiente.
La conflictividad religiosa provocó la creación de dos estados separados por la religión en lo que había sido la colonia británica: Pakistán, un país de mayoría musulmana, y la Unión India, de mayoría hindú. En 1971 la zona oriental de Pakistán se separó bajo el nombre de Bangladesh. Las disputas fronterizas dificultaron las relaciones entre indios y paquistaníes; mientras en Pakistán se sucedieron una serie de gobiernos militares, la India mantenía una democracia parlamentaria.
Al final de la década de 1950, los movimientos a favor de la independencia, avivados por la intensificación del nacionalismo, habían acabado con la mayoría de los gobiernos coloniales de Asia.

¨En el suroeste de Asia¨
En 1948 se crea el Estado de Israel en territorio palestino, a modo de compensación y como consecuencia directa del Holocausto judío.
Los países árabes observaron con desagrado cómo la ONU aprobaban la constitución de un país que generó la oposición de las naciones de la región, favorables a la causa palestina (por la que se abogaba a favor de la constitución de un Estado palestino en ese mismo territorio). Las hostilidades entre Israel y sus vecinos árabes, Egipto, Siria, Irak y Jordania, interrumpieron el comercio mundial con el cierre del canal de Suez (1956-1957, 1967-1975), mientras Israel ocupaba cada vez mayores extensiones de territorio árabe. Los refugiados palestinos expulsados de Israel crearon la Organización para la Liberación de Palestina y exigieron la devolución de sus tierras. Los esfuerzos en favor de un acuerdo dieron lugar a un tratado de paz egipcio-israelí en 1979, pero las diferencias árabe-israelíes no pudieron ser solucionadas. Tras la conclusión de la guerra del Golfo Pérsico en 1991, Israel y otros países del Próximo Oriente se reunieron en Madrid, España, en noviembre del mismo año. Las conversaciones, iniciadas en Madrid y concluidas en la ciudad de Washington, Estados Unidos, en 1993, representaron para muchos países los primeros contactos directos con Israel.
Oriente Próximo se había dividido en numerosos estados, cada uno sujeto a tensiones internas.
Irán experimentó una explosión nacionalista en la década de 1950 bajo su primer ministro, Mohammed Mossadegh, que nacionalizó la industria petrolífera. Veinticinco años más tarde, una rebelión popular, dirigida por el nacionalismo religioso y las fuerzas políticas democráticas, provocó la destitución de Muhammad Reza Shah Pahlavi, que había sido apoyado por los Estados Unidos.
Irak aprovechó la oportunidad para emprender una sangrienta, costosa, y a la larga negativa para sus intereses, guerra fronteriza con su vecino oriental. Irak ocupó Kuwait en 1990, pero la guerra del Golfo Pérsico de 1991 restauró la independencia kuwaití.

Mei

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente blog mana!!!! muy completo e interesante, sirve no solo para tus alucnos xq la info es d gran calidad... nos vimos
Lomi